RESEÑA: 'Toast' de Nigel Slater, Teatro Traverse. Festival Fringe de Edimburgo ✭✭✭✭

Mark Ludmon reseña la adaptación de Henry Filloux-Bennett de Toast de Nigel Slater en el Traverse Theatre en el Edinburgh Fringe

Foto: The Other Richard Toast de Nigel Slater Traverse Theatre, Edinburgh Fringe

Cuatro estrellas

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Casi se pueden oler los pasteles y repostería que se preparan en la nueva adaptación escénica de las memorias del chef y escritor culinario Nigel Slater, Toast. A medida que el joven Nigel aprende a cocinar de su madre y del libro Cookery In Colour de Marguerite Patten, los vemos crear tartas cargadas de cuajada de limón y mermelada, pastel de Navidad y tartaletas de carne picada. El público incluso llega a probar algunas de las recetas de Nigel, desde flapjack hasta tarta de merengue de limón.

El poder de la adaptación de Toast por Henry Filloux-Bennett radica en la nostalgia de la comida. Ver a Nigel ayudando a su madre en la cocina me llevó directamente a mi propia infancia, incluso el cuenco de mezcla es idéntico al que usó mi madre toda su vida. Ambientado en los años 60 y principios de los 70, el espectáculo está lleno de referencias a golosinas que traerán recuerdos de juventud, desde Jammie Dodgers y Angel Delight hasta Sherbet Fountains y Flying Saucers. Una ligera niebla se desplaza continuamente desde la izquierda del escenario, recordándonos que esta es una obra de memoria, impregnada del humo quemado del pan de tostada de la Sra. Slater (aunque afortunadamente no el aroma de él).

Siguiendo a Nigel desde los nueve hasta los 16 años, cuando se convirtió en chef profesional, nos lleva desde la temprana pérdida de su amada madre hasta el matrimonio de su padre con la temible pero fabulosa Joan. Los momentos más destacados de la obra son la intimidad que Nigel tiene con su madre cuando cocinan juntos y la feroz rivalidad que mantiene con Joan en torno a cocinar bizcochos, pastel Battenberg y pavlova. También sigue la emergente sexualidad de Nigel, desde su temprana pero inocente adoración por el apuesto jardinero hasta su primer beso.

El llamativo decorado, diseñado por Libby Watson, es una evocación estilizada de las cocinas de los años 60, reminiscentes de los programas de cocina en TV, especialmente cuando Nigel demuestra algunos de sus platos favoritos. Narrando la historia, Sam Newton es encantador como Nigel junto a Lizzie Muncey, quien es excelente como las mujeres que inspiraron su amor por la cocina, desde su madre hasta su primer jefe. Mark Fleischmann equilibra hábilmente los conflictos del estricto padre de Nigel, dividido entre el amor y el resentimiento, mientras que Marie Lawrence es memorable como la impecablemente pulida pero dura como un clavo Joan.

El director Jonnie Riordan ha aprovechado sus habilidades como director de movimiento para introducir secuencias coreografiadas que, aunque encantadoras, ralentizan el ritmo a veces. Lleno de humor y tristeza, Toast atraerá a los amantes de la comida pero también es una obra sobre la pérdida, evocando los placeres inocentes de la niñez y el dolor en el camino hacia la adultez.

En cartel hasta el 26 de agosto de 2018

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