RESEÑA: Instrucciones para un Montaje Correcto, Royal Court Theatre ✭✭✭

Mark Ludmon reseña la obra de Thomas Eccleshare Instrucciones para un montaje correcto en el Royal Court

Mark Bonnar, Brian Vernel y Jane Horrocks. Foto: Johan Persson Instrucciones para un montaje correcto

Teatro Royal Court

Tres estrellas

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Por más que leas cuidadosamente las instrucciones de tus muebles de montaje, es probable que descubras que no siempre se ensamblan como esperabas. La premisa de la nueva sátira de Thomas Eccleshare, Instrucciones para un montaje correcto, es que esto se aplica también a la crianza de los hijos: puedes esforzarte por darles una educación segura y de apoyo y seguir todas las reglas, pero no hay garantías de que salgan perfectos.

Mark Bonnar, Brian Vernel y Jane Horrocks. Foto: Johan Persson

Cualquiera que haya intentado montar una estantería de Ikea o ser padre encontrará resonancias en esta fantasía sobre una agradable pareja de clase media, Harry y Max, que compran un robot adolescente en formato de montaje llamado Jån. Eccleshare saca mucha comedia ingeniosa en sus esfuerzos fallidos por ensamblar las piezas y encontrar los ajustes que crean el modelo “blanco y educado” que ansían. Al igual que un hijo real, Jån aprende de su entorno, lo que a menudo conduce a errores como obscenidades o sentimientos de extrema derecha, pero estos siempre se pueden ajustar con un toque del mando a distancia o una vuelta del chip de procesamiento.

Jason Barnett y Michele Austin. Foto: Johan Persson

No obstante, pronto emerge que su realista niño robótico tiene un parecido sorprendente con Nick, el hijo que Harry y Max están lamentando. Al igual que la obra anterior de Eccleshare, Heather, los elementos de fantasía ligeros y el dispositivo teatral son una manera de explorar temas más serios, en este caso, el sentimiento de pérdida de una pareja y su miedo a haber fallado como padres. Gracias a las sólidas interpretaciones de Mark Bonnar y Jane Horrocks como Harry y Max, hay momentos poderosos de claridad emocional cuando esto sale a la luz, pero hay una tendencia a que sea superado por el concepto general.

Mark Bonnar en Instrucciones para un montaje correcto. Foto: Johann Persson

Brian Vernel es excelente como el hilarantemente impredecible Jån y el problemático adolescente Nick, mientras que Michele Austin, Jason Barnett y Shaniqua Okwok son amigos de la familia que observan el nuevo proyecto de Harry y Max con fascinación comprensiva pero desconcertada. Está dirigido de manera inventiva por Hamish Pirie, con un ingenioso escenario de Cai Dyfan hecho de líneas rectas y capas como de montaje que se desmontan a medida que se revela la verdad de la obra, con bolas de embalaje de poliestireno que nunca están lejos. En su historia de un niño robot, que termina con un pequeño giro, la idea parecerá familiar para los fanáticos de series de televisión como Black Mirror y Los sueños eléctricos de Philip K. Dick, pero, con su sólido elenco y diseño llamativo reforzado por un toque de ilusión, es inteligente y entretenido, confirmando a Thomas Eccleshare como un escritor a seguir.

En cartelera hasta el 19 de mayo de 2018

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